El equipo argentino juvenil de rugby superó 45 a 20 al conjunto asiático y se aseguró su participación en la próxima Copa del Mundo de la categoría.
Por momentos con angustia, en otros con naturalidad. Los Pumitas le ganaron con justicia a Japón por 45 a 20 y se aseguraron un lugar en el próximo Mundial, pero como en toda la copa sufrieron por sus propias intermitencias.
Cuando se quedaron con 14 jugadores por la amarilla a Dicapua, aparecieron en toda su dimensión y marcaron la diferencia lógica.
Con la victoria de Fiji sobre Italia en la apertura de la cuarta jornada del Mundial M20 que se disputa en Sudáfrica, (46-212), Argentina tenía la obligación de ganar para no tener que jugar por el descenso frente a los italianos, una situación incómoda que no es lo que fueron a buscar los dirigidos por Álvaro Galindo.
Distintas razones, falta de consistencia, imaginación y variantes, privaron al seleccionado juvenil de luchar por algo más en este Mundial, y pasaron de estar muy cerca de la clasificación a las semifinales – a 20 minutos del final contra los sudafricanos ganaban 16-10 – a jugar por este noveno lugar que los dejó ante un escenario muy peligroso.
